Está claro que, cada vez más, los consumidores queremos saber dónde han sido producidas nuestras prendas. Un claro ejemplo de ello es el debate que esta semana ha abierto The Business Of Fashion al respecto.
Te recomiendo encarecidamente el artículo de Luca Solca, The Made in dilema: to label or not to label (El dilema del made in: etiquetar o no etiquetar”), en el que nos cuentan que aunque las marcas que comercializan en Europa no tiene la obligación de etiquetar, cada vez son más los consumidores que demandan saber el origen de sus prendas. Sobre todo, los chinos, que quieren asegurarse que sus relojes están hecho en Suiza y sus cosméticos en Francia).
Me hace especial ilusión el estudio que Solca comparte en el artículo: un análisis que ha realizado la empresa Exane BNP Paribas en cooperación con Contact Lab, Exane BNP Paribas, acerca de la información sobre trazabilidad que ofrecen las grandes marcas en su web. Y es que justamente el otro día te hablaba de la poca importancia que muchas marcas dan a este tema y de, en cambio, el valor que le da a ello el consumidor.
El estudio clasifica las marcas en cuatro grupos: desde las que no tienen ningún problema en explicar el “made in” (como Bottega Veneta, Brunello Cucinelli, Valentino, Saint Laurent, Gucci, Balenciaga, Fendi y Tod’s), hasta las que no dicen ni pio acerca de ello (Chanel, Dior, Prada, Dolce & Gabbana, Hugo Boss, Coach y Tory Burch).
También en la misma línea, el responsable de estartegia de FutureBrand, Tom Adams, escribe un articulo de opinión en The Business Of Fashion acerca del valor estratégico y el poder que para una compañía tiene explicar dónde ha sido producida una prenda y bajo qué condiciones. Me gusta especialmente del artículo la reflexión que Adams hace acerca de que que una prenda haya sido realizada en el país esperado, ésta no tiene que tener peor calidad o menos ética social y ambiental. Lo importante es que la marca tenga una explicación lógica para externalizar la producción y sepa explicarlo al potencial consumidor. Tienes el artículo completo aquí: Harnessing the power of made in labelling (Aprovechar el valor del etiquetado).