Desde hace más de dos años, de manera ininterrumpida, cada lunes del mundo he publicado post. La verdad es que normalmente es un ejercicio que me relaja; me gusta sentarme delante del ordenador el domingo por la tarde y compartir contigo, contigo, contigo y con el cada vez más grande número de seguidores del blog, aquellas cosas que me pasan, que veo y que creo que pueden ser de interés para los apasionados de la moda y de la sostenibilidad. Pero hoy, no me apetece.
Foto para que veas que no miento, mi cara de cansancio no tiene desperdicio. Con Ali, de Green&Trendy, Coco de Coco La Coquette y Laura Laporta. Parte del equipo de comunicación de MSBCN. ¡Gracias equipazo!
Sí, no me apetece. Hoy estoy bastante agotada tras un fin de semana en el que ha tenido lugar la segunda edición del Barcelona Ethical Fashion Fest, el Festival de la Moda Sostenible, evento de referencia de moda y sostenibilidad en el sur de Europa y que en la presente edición ha reunido a más de 4.000 personas en el edificio histórico de la Universitat de Barcelona.
Como siempre, he vivido el evento en primerísima persona, como responsable de comunicación de Moda Sostenible Barcelona y, además, este año he tenido el placer de moderar una mesa redonda que, bajo el título «Cómo acabar con tu jefe», ha reunido en una misma mesa a Enric Escofet, co-autor del documental Les Costures de la Pell; Laura Muxí, responsable en Cataluña de la Campaña Ropa Limpia; Esther Vivas, periodista, investigadora en movimientos sociales y políticas agroalimentarias; y Queralt Antú, CEO de la productora OVNI Medialab; para hablar sobre moda y derechos sociales. Una experiencia genial en la que nos ha faltado tiempo para seguir debatiendo sobre un tema que da mucho de sí, y es que cada uno de los ponentes podrían haber estado una hora enterita hablando. Gracias a todas y todos.
La zona pop-up del BEFF 2015 el sábado por la tarde. Foto cortesía de Moda22
Además, el jueves estuve en el Centro Superior de Diseño Hacer Creativo de Zaragoza impartiendo una conferencia sobre moda y sostenibilidad junto a Elena Salcedo, autora de Moda ética para un futuro más sostenible.
Ambas experiencias han sido geniales y tengo muchas ganas de contártelas con tranquilidad y bien contadas. Pero hoy no puedo, no me veo capaz, sobre todo no me veo capaz de hacerlo bien. Hoy mi cuerpo y mi cerebro me piden parar un rato, descansar, no hacer nada, quizás mirar una buena película, dar un paseo, meditar o, por qué no, meterme en la bañera (aunque no sea nada sostenible me acabo de mudar a una nueva casa con una y me muero de ganas de probarla), pero no me piden estrujarme el cerebro en el blog. El mundo necesita gente que ame lo que hace. Y yo, como sabes, amo con locura mi trabajo y mis hobbies. Pero hoy necesito poner el «pause».
Esta tarde de domingo voy a ser coherente con la filosofía de vida que predico, una vida slow que, como ya te puedes imaginar por la cantidad de saraos en los que ando metida, más allá de la ropa y la cosmética, me cuesta mucho cumplir… Y voy a dejar el blog así, con este breve post en el que te dejo alguna foto del fin de semana y poco más cortesía de Joan Subirats, fotógrafo oficial de Moda Sostenible Barcelona. Quién sabe, quizás no es tan grave y también te gusta leer, de vez en cuando, posts de este estilo.
Momento del desfile de Slow Artist
Y tú, ¿eres coherente con el estilo de vida que predicas? ¿Me cuentas el secreto de cómo lo consigues? ¡Feliz semana y gracias por la comprensión!
La imagen que abre este post (como muchas de las que estás viendo últimamente en el Facebook, el Twitter y el Instagram de soGOODsoCUTE) son creación de Ariadna, diseñadora gráfica y nuevo fichaje de soGOODsoCUTE. ¿Te gusta la estética?
Aquí ya hacía mejor cara porque estaba a punto de marcharme para a casa. Con Mar Rocabert y Montserrat Rosell de Cucdecol, María Pérez-Hickman y Ari Rovira. Parte del equipo de comunicación de MSBCN. ¡Gracias equipazo!
«Quién sabe, quizás no es tan grave y también te gusta leer, de vez en cuando, posts de este estilo.»
¡Por supuesto! ¡A descansar! 😀
Igual das ejemplo y haces que otras personas se planteen que parar de vez en cuando no es tan malo… 😉
Perfecta la filosofía que destila este post. A descansar uno o dos días o lo que haga falta para volver a tener fuerzas de amar lo que se hace.
Yo intento sumarme a la slow life pero reconozco que siempre voy estresada y preocupada :/
Con ganas de tus posts sobre este súper evento y deseando que te tomes ese baño bien merecido!