Ayer el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) acogió el Sustainable Sunday, una jornada orientada a acercar la sostenibilidad a la ciudadanía. En el marco del Fashion Revolution, distintos miembros de la Asociación de Moda Sostenible Barcelona dimos una charla sobre moda consciente. A mí me pidieron que explicara por qué un día se me ocurrió poner en marcha soGOODsoCUTE. Preparando la presentación, me di cuenta que nunca he hablado de ello en el blog, así que hoy he decidido contártelo aquí. ¿Te apetece descubrirlo?
Visitando el showroom de Moda Sostenible Barcelona en Sustainable Sunday
Si estuviste ayer en el CCCB, te animo igualmente a echarle un vistazo al post, ya que introduciré algunos motivos que en la presentación en formato PechaKucha (20 diapositivas, 20 segundos) no me dio tiempo a comentar y porque, a lo largo del post, iré intercalando fotografías de la jornada de ayer. Empezamos.
Pues bien, mi interés por la moda me viene de pequeña, cuando me pasaba horas delante el espejo probándome looks imposibles, jugaba a ser la modista de mis muñecas –gracias mama por enseñarme a coser-, y me gastaba cualquier ahorro en ropa o, mejor aún, revistas de tendencias. Otra afición que he tenido siempre –y aún conservo- es la de sentarme en la calle y observar cómo viste la gente. Supongo que el hecho de vivir en pleno centro de Barcelona me ha facilitado e incentivado mucho este hobby. Por aquel entonces tenía clarísimo que de mayor me dedicaría a algo relacionado con la moda.
Detalles del showroom del Moda Sostenible en Sustainable Sunday. Una pasada cómo quedó todo (cartel, probador, mobiliario, etc.). ¡Cada día más profesionales!
Y aunque nunca dejé de ser una apasionada de la moda, me hice mayor y, como me encantaba escribir, decidí estudiar periodismo. No sé muy bien cómo –bueno, sí o sé, pero es un poco largo de explicar– acabé especializándome en comunicación social y comunicación digital y tras diversas experiencias laborales, acabé siendo la directora de comunicación y marketing de una fundación dedicada a proyectos sociales y, posteriormente, ejecutiva de cuentas de una consultora de comunicación social y Responsabilidad Social Corporativa. En total, diez años de trabajo vinculado a las problemáticas sociales y ambientales con las que se encuentra nuestro planeta, entre ellas, las relacionadas con la industria de la moda, una de las más contaminantes.
Aún así, yo seguía disfrutando de la moda como cuando era pequeña y, al salir del trabajo, me iba a mirar tiendas, a observar a los turistas cómo vestían o a leer revistas de moda y –el gran aporte de Internet a amantes de la moda–, consultar los miles de blogs de moda que circulan por ahí.
Con los compañeros del PechaKucha Sustainable Sunday. De izda a dcha.: Montserral Rossell, Vanesssa Facho, Mar Rocabert, María Fernández, Valentina Thörner, Santí Mallorquí, Sònia Flotats, Glòria Rosique y Elena Salcedo
Como puedes imaginar, mi realidad laboral (centrada en proyectos que buscaban mejoras sociales y ambientales) chocaba bastante con mi hobby (incentivar una industria más bien poco ética y muy poco sostenible). Esto me provocaba un malestar que, exagerando un poco, hacía que escondiera mi gran pasión por la moda a mis compañeros de trabajo. Pero, ¿qué tenía que hacer? ¿Vestir toda la vida con la ropa que en aquel momento yo consideraba sostenible (pantalones hippies de cáñamo y camisetas en defensa de las ballenas)? Me negaba en rotundo. Y es que esa ropa, además de que estéticamente no me gustaba, para mí era muy poco sostenible, ya que por más ecológica o por más mensajes sociales y ambientales que incorporara, si no era bonita, nadie se la pondría, con lo que acabaría provocando un residuo inútil.
Llevaba meses reflexionando sobre ello cuando en una charla en BioCultura escuché a Gema Gómez, creadora de la consultoría Slow Fashion Spain, decir: “No hay nada menos sostenible que algo feo”. ¡Qué fuerte! Gema había sido capaz de sintetizar en una sola frase mis reflexiones filosóficas sobre “moda y sostenibilidad”. Esa frase se convirtió en mi mantra y, precisamente, es más o menos el título del primer post que escribí en soGOODsoCUTE.com, y durante un año largo fue el baseline del blog. Un blog que nació con el objetivo de aglutinar buenas prácticas sociales y ambientales en la industria de la moda que me permitieran (y te permitieran) poder vestir cool con la tranquilidad de no sobreexplotar el planeta ni las personas.
He añadido unas miniaturas de las distintas presentaciones en el PechaKucha. Haz click en cada imagen para verlas completas:
Casi dos años después –y gracias a ti que me lees-, soGOODsoCUTE se ha convertido en uno de los blogs de referencia en lengua española sobre moda ética, moda sostenible y moda consciente y el único en el que, de manera recurrente, aparece su editora –o sea, yo- mostrando sus outfits diarios. Una renuncia consciente a mi privacidad pero que creo imprescindible para que la moda ética y la moda sostenible llegue a quien realmente tiene que llegar: a personas como tú y como yo a las que nos apasiona la moda y utilizamos los blogs de moda como fuente de inspiración.
Y esta es, más o menos, la historia que hay detrás de soGOODsoCUTE. Si ahora me preguntas por qué sigo escribiendo cada semana, te diré que lo hago, a parte de porque me lo paso bomba, por ti que me lees. Y es que no hay mejor recompensa que ver como semana a semana las visitas al blog no paran de aumentar y el número de comentarios no para de crecer. Comentarios en los que me cuentas que gracias a soGOODsoCUTE has descubierto que la moda sostenible mola, que le has pillado el gusto a esto de consumir y vestir de manera más consciente y, en el caso de marcas y diseñadores, que has vendido tal y cual prenda gracias a que alguien me la vio vestir en el blog. Esto es lo que ahora da sentido a soGOODsoCUTE y a que mi cabeza no pare de pensar qué más te puede interesar.
Justo antes de empezar el PechaKucha
Sudadera: Out of Office (ver post)
Jeans: System Action
También llevaba americana y calzado de Mango, pero en esta foto no se ve.
Por todo ello, te pido por favor que, siempre que te apetezca, me hagas llegar tus comentarios sobre las marcas de las que hablo, las propuestas de moda consciente y, cómo no, qué te gustaría leer en el blog. Y es que esto sólo tiene sentido contigo aquí. ¡Gracias!
Fashion Revolution Day
Espero poder escribir en breve mi visión sobre el Fashion Revolution Day 2015, pero como supongo que estarás algo ansioso por saber cómo fue el Fashion Revolution en Barcelona, te dejo aquí algunas fotos del evento que organizamos con Moda Sostenible Barcelona. La conclusión rápida: ¡increíble! Muchas personas conocidas pero también muchas no conocidas que aparcaron la timidez, la pereza o el cansancio de un viernes tarde para participar en la pasarela improvisada y en la performance con 400 kg de ropa usada. ¡Gracias a todos los que lo habéis hecho posible!
¡Hola Sònia! Te sigo desde que fui a una charla sobre moda ética en la Fira d’Economia Solidària en la antigua fábrica Fabra i Coats de Sant Andreu, en Barcelona. Desde entonces, he visitado varias tiendas de ropa ética y/o ecológica, me he interesado, he leído, me he comprado prendas en tiendas de segunda mano y he hablado con amigos, familia y conocidos de lo que gente como tú hace y de lo fácil que es hacer las cosas un poquito distintas para que sean un poquito mejor.
¡Gracias, Sònia!
¡Aaay! Me he emocionado leyendo el post porque has contado los orígenes del blog, el cómo empezó a interesarte la moda sostenible, y me he sentido un poco identificada con ese proceso. Me hubiera encantado asistir a las charlas, pero bueno, me conformo leyendo los posts que estáis publicando las ponentes 🙂
Yo te he conocido hace poco y a través del blog. Pero tu historia se parece mucho a la mia. Pero yo al final he decidido sacar una marca de moda sostenible y por tus mismos principios no podía sacar otro tipo de ropa que no fuera con el que me sintiera feliz. Es mucho más costoso y dificil. Pero es mucho más gratificante. Animo y a seguir por este buen camino. Espero conocerte a ti y a la asociación prontito
http://www.crisb.es
http://blog.crisb.es
Gracias Sònia por compartir tu historia. ¡Que sigues así con tu «je ne sais quoi»!
A bientôt
Me dio un palo tremendo no poder estar ahí, aquí en Suecia como te comenté por twitter se organizó algo en Estocolmo, sin mucha repercusión la verdad, una pena… supongo que de algún modo a la ciudadanía de los países en crísis son es más fácil tocarles la fibra con la sostenibilidad. Aquí hay muy poca responsabilidad en cuanto a consumo. Se recicla mucho y el comercio de segunda mano es muy grande, pero los niveles de consumo de moda rápida son exhacerbados y la gente ni sabe ni quiere saber.
Yo hago mis campañas de vez en cuando recordándole a mis alumnas que la ropa que llevan probablemente sea gracias a la explotación infantil y la contaminación de algún río en Asia… me miran raro, luego miran al suelo, luego cambian de tema, así son los Suecos chica.
Gracias por tus posts, te leo tolrato.
Lou
http://www.bellezaslow.com
Gracias por promover la moda sostenible. Ojalá tu mensaje de sostenibilidad llegue a mucha gente. Estoy totalmente de acuerdo contigo y apoyo el movimiento «fashion revolution». Espero que no se quede sólo en fotos de instagram con la etiqueta por fuera y que consigamos cambiar algo entre todos. Un fuerte abrazo.