Cada vez hay más opciones de calzar unas sneakers, sandalias o incluso botas sostenibles. ¿Pero qué pasa con las bailarinas y los stilettos de toda la vida? Pues hasta ahora era muy difícil –por no decir imposible- encontrar propuestas en este sentido. Hasta que descubrimos a ONNOA.
Se trata del proyecto que ha puesto en marcha Damián Fuentes quien, tras más de 20 años trabajando en el sector industrial textil, tuvo la inquietud, “que luego se convirtió en necesidad” de crear una empresa que tuviera un impacto positivo en su forma de hace las cosas. “Quería demostrar que se pueden fabricar productos de la misma calidad o mejor a los que se fabrican actualmente, pero con un menor impacto hacia el medio ambiente”.
Bajo este principio nace ONNOA. Cogiendo el mejor modelo básico de stiletto y de bailarina existente y analizando pieza a pieza para buscar la mejor alternativa, más sostenible y de igual calidad o superior, para cada componente. De esta manera, y tal y como nos cuenta Damián, “la clienta de ONNOA puede tener la confianza y tranquilidad de que los zapatos que usa, además de ser de la mejor calidad, se han fabricado con el menor impacto posible para nuestro planeta, para ese tipo de calzado”. Y es que ONNOA está dirigido a una mujer que no quiere renunciar al estilo, la calidad y la comodidad, pero que a la vez quiere tener la tranquilidad y satisfacción de que los productos que usa están fabricados por marcas que se preocupan por fabricar de una manera sostenible de verdad.
Actualmente la firma tiene dos líneas, la de piel y la vegana.
En la opción de piel, todas las partes del zapato (corte, forro, plantilla y suela) son de piel curtida por el tradicional método de curtición vegetal, que utiliza plantas para el curtido de la piel y no hay ninguna presencia de cromo u otros metales pesados. “Este sistema de curtición -tal y como nos comenta Damián- solo se realiza en un 5% de las pieles ya que es más lento y costoso», pero tiene ventajas en las tres fases de uso del producto: en la producción, los trabajadores no están en contacto con contaminantes y peligrosos productos químicos; durante el uso, no hay riesgo de traspaso del cromo a la piel de la usuaria por contacto; y al final de su vida útil, si no se tratan adecuadamente, al degradarse y con la lluvia, este cromo de la piel pasa a las aguas subterráneas y luego con el riego, a nuestra cadena alimenticia.
Aún así, la apuesta fuerte de ONNOA está en la línea vegana, donde la firma ha hecho un gran trabajo de análisis y selección de los mejores materiales y dónde, además, ve un gran potencial de mejora porque cada día surgen nuevos componentes reciclados que pueden aportar mayor calidad a este tipo de calzado con un impacto ambiental y social muy bajo. “Si las circunstancias nos lo permiten -nos comenta Damián-, nos gustaría poder evolucionar a ser una marca 100% vegana”.
Por lo que respecta al origen de los materiales, Damián nos comenta que la mayoría son de empresas españolas de la provincia de Alicante, aunque algunos los han tenido que importar de fuera ya que no los han encontrado aquí con las mismas prestaciones. El montaje del zapato sí que se realiza cien por cien en la ciudad de Elda (Alicante), con larga tradición en la fabricación de calzado de mujer de alta calidad.
Nosotras no nos lo pensamos dos veces. Y es que ONNOA es el producto perfecto para incorporar al fondo de armario: un básico atemporal, de calidad, cómodo y, además, sostenible. El problema ahora es decidirse por un color. Tú, ¿con cuál te quedas?
+ info: ONNOA.
